La noción de prótesis se emplea para nombrar al dispositivo artificial y a la técnica que se utilizan para reparar un órgano que falta del cuerpo de una persona o de un animal. Dental, por su parte, es un adjetivo que se refiere a lo vinculado con los dientes (los órganos de gran dureza que se encuentran en las mandíbulas y que contribuyen a la masticación y el habla).
Una prótesis dental, por lo tanto, permite reemplazar uno o más dientes que, por distintos motivos, se han perdido. Su finalidad es permitir que el paciente pueda masticar los alimentos y expresarse de manera correcta, dos cuestiones que, ante la falta de dientes, no podría realizar sin la prótesis en cuestión.
Podemos decir, por tanto, que existen dos tipos de prótesis:
-Las parciales, que usan cuando sólo hay que sustituir uno o varias piezas dentales naturales.
-Las totales, que se emplean para sustituir todos los dientes naturales que tenga el paciente. Estas, por su parte, se componen de dos partes: las prótesis superiores, que reemplazan las piezas que estaban situadas en la parte de arriba de la boca, y las prótesis inferiores, que hacen lo propio con las de abajo.
Las prótesis dentales deben tener ciertas características para que sean retenidas en la boca de la persona y se mantengan en el sitio adecuado. Existen diversos tipos de prótesis que el profesional puede sugerir a su paciente de acuerdo a las características específicas de su boca (teniendo en cuenta qué cantidad de piezas dentales le faltan, si desea una prótesis fija o removible, etc.).
Las personas a las que se les coloca una prótesis dental tienen que hacerle frente a una serie de consecuencias, tales como estas:
-Deben tener paciencia porque puede resultar molesta al principio. Lo habitual es que esa incomodidad esté presente durante dos semanas y luego desaparezca por completo.
-En algunos casos, hay personas que al ponerse o quitarse la prótesis sufren náuseas. Este síntoma viene a ser más mental que físico, ya que se produce como consecuencia de pensar que un objeto extraño entra en la boca.
-Pueden sufrir hinchazón e irritación en la boca, ya que un elemento extraño como es la prótesis puede causar inconvenientes al principio.
-Suele traer consigo que la persona que tiene la prótesis produzca más saliva de lo que viene siendo normal.
-Asimismo hay quienes en un primer momento parece que sienten dificultades tanto al hablar como al comer. Esto es algo habitual durante los primeros días pero luego son síntomas que desaparecerán, salvo en excepciones que requerirán acudir al profesional médico que puso el implante.
Es posible encontrar prótesis dentales fabricadas con diferentes materiales. Pueden combinar resina, porcelana y diferentes aleaciones metálicas, según las necesidades y el presupuesto disponible.
Cuando la prótesis dental reemplaza la totalidad de los dientes (ya que al paciente no le quedan dientes originales), suele recibir el nombre de dentadura postiza. Es importante destacar, de todos modos, que existen prótesis que incluyen un número variable de dientes artificiales y que se integran a la boca respetando la presencia de los dientes naturales que aún subsisten.
Rellena el formulario y nos pondremos en contacto contigo.